La entrada de hoy está dedicada a la consideración de la gárgola como obra de arte y su exposición en museos.
El estudio y recopilación de las gárgolas implica una serie de dificultades. Este hecho podría ser la causa de que hasta hoy haya sido un tema poco estudiado y lamentablemente poco valorado. La gárgola casi no ha interesado, incluso algún autor afirma que en arquitectura se ha despreciado.
Al indagar en las causas de este desinterés, en primer lugar hay que tener en cuenta los factores prácticos y técnicos, como la ubicación de las gárgolas que conlleva la petición de permisos para acceder a los tejados, con la consabida dificultad para internarse por algunos sitios peligrosos o de imposible acceso; la escasez de documentación y bibliografía; la dificultad para fotografiar las gárgolas más alejadas, algo que actualmente se ha resuelto gracias al moderno material fotográfico con objetivos de gran alcance; o el gran deterioro que sufren continuamente por causas como sabemos climáticas (lluvia, humedad, viento), químicas (contaminación), biológicas (aves, musgos), o humanas (falta de mantenimiento, agresión directa) que, junto a la desaparición de muchas figuras, ha conducido a reparaciones, restauraciones y reconstrucciones, en algunos casos aceptables pero en otros nos hemos encontrado con auténticas aberraciones.
En segundo lugar, hay otra causa que podría haber generado este desinterés. Las gárgolas, como canalones de desagüe, han sido consideradas como elementos funcionales y con una utilidad clara y precisa, por lo que probablemente se han visto simplemente como canalones decorados que forman parte de un conjunto incluido en un proyecto arquitectónico.
Afortunadamente —sobre todo en los últimos años— la gárgola se estudia, no sólo como parte de la escultura monumental de un edificio y considerada como una de las manifestaciones del arte marginal, sino como obra de arte individual.
Una de las muestras del interés y relevancia que han ido adquiriendo las gárgolas como obras de arte, es su exposición en los museos.
Al hablar de las restauraciones que se realizaron en el siglo XIX en la Catedral de Notre-Dame de París, Michael Camille (1958-2002) dice que mientras que otros elementos reemplazados, como por ejemplo partes de un tímpano, eran enviados al Louvre para ser exhibidos como grandes ejemplos de la escultura gótica francesa, a las erosionadas y viejas gárgolas, consideradas funcionales y decorativas, se las dejaba pudrirse como ornamentos de jardín. Las gárgolas serían expuestas en museos mucho más adelante.
Por fortuna, actualmente vemos gárgolas en museos de todo el mundo para su conservación y disfrute de los amantes del Arte. Hoy en día las gárgolas gozan de valor artístico e investigadores de diversas disciplinas (historiadores, arquitectos, escultores, etc.) nos dedicamos a estudiarlas y recopilarlas para así tratar de excluirlas del abandono y desinterés.
Nuestro mayor objetivo al estudiar y fotografiar las gárgolas es constatar su valor, no sólo desde su generalidad, sino desde su individualidad como imagen singular que contiene una relevancia estilística e iconográfica que nos desvela una época con sus modalidades artísticas y sus maneras de pensar y vivir. La gárgola es una obra de arte única, de una gran belleza escultórica y digna de estudio y protección.
Gárgolas en museos
- Museo Arqueológico Nacional de Atenas (Grecia)
- Museo Arqueológico Nacional de Atenas (Grecia)
- Museo de los Agustinos (Toulouse, Francia)
- Museo de los Agustinos (Toulouse, Francia)
- Museo de los Agustinos (Toulouse, Francia)
- Museo de los Agustinos (Toulouse, Francia)
- Museo de los Agustinos (Toulouse, Francia)
- Museo de los Agustinos (Toulouse, Francia)
- Museo de los Agustinos (Toulouse, Francia)
- Museo Provincial de Salamanca
- Monasterio de Alcobaça (Portugal)
- Museo de la Catedral de Salamanca
Espaço Museu. Paróquia da Gloria (Aveiro, Portugal)
- Museo de la Catedral de Aquisgrán (Alemania)
- Museo de la Catedral de Aquisgrán (Alemania)
- Museo del Château Royal de Blois (Francia)
- Museo del Château Royal de Blois (Francia)
- Museo del Château Royal de Blois (Francia)
- Museo del Château Royal de Blois (Francia)
- Museo Nacional de Indonesia (Yakarta)
- Museo Nacional de Indonesia (Yakarta)
Bibliografía consultada
CAMILLE, M., The Gargoyles of Notre-Dame. Medievalism and the Monsters of Modernity, Chicago and London, The University of Chicago Press, 2009.
HALDANE, S., Faces on Places. About Gargoyles and Other Stone Creatures, New York, The Viking Press, 1980.
MORALES BAENA, A. M., Las gárgolas del claustro del monasterio de San Juan de los Reyes de Toledo, Tesis inédita dirigida por M. Prieto Prieto, Departamento de Pintura-Restauración. Facultad de Bellas Artes. Universidad Complutense de Madrid, 1994 (leída en 1995).

Doctora en Historia del Arte. Investigadora especializada en el estudio de las gárgolas.
Fantástico artículo, que me ha recordado mi visita al magnífico monasterio y museo de los agustinos de Toulouse. Una ciudad de más que recomendable visita, donde también merecen mucho la pena Saint Sernin, la Catedral de Saint Étienne y el Museo Arqueológico de Saint Raymond, con espectaculares colecciones, entre otros monumentos y museos.
Muchas gracias Alejandro! Efectivamente, Toulouse es muy recomendable y el museo es una maravilla.